¿Los jinetes y amazonas tenemos que entrenar?

Las amazonas y jinetes, al igual que cualquier deportista, tenemos que realizar entrenamientos complementarios para mantener nuestro cuerpo equilibrado. 

Siempre hacemos hincapié en la importancia de variar los entrenamientos con nuestros caballos para tener un buen equilibrio muscular y prevenir lesiones. Pero tampoco podemos olvidarnos de nosotros mismos, los jinetes y amazonas somos también deportistas y por ello, deberíamos realizar entrenamientos específicos para montar mejor a caballo.

La equitación tiene muchos beneficios sobre tu salud física, por ejemplo, activa la musculatura profunda de la columna, que tiene que contraerse para contrarrestar el desequilibrio que nos produce el caminar del caballo. Además, montar a caballo nos aporta equilibrio, propiocepción y coordinación, y generalmente, se trabaja de forma simétrica.

Sin embargo, también tiene varios inconvenientes, la mayoría de ellos derivados de que siempre llevamos la misma posición cuando montamos a caballo: sentados a horcajadas con una cierta flexión de cadera y de rodilla, flexión dorsal de tobillo, nuestra espalda tiende a la rectificación general de curvaturas y los hombros a rotación interna, nuestro bíceps está en permanente tensión y nuestros flexores de manos y muñeca están siempre trabajando.

Este es el esquema general de una amazona o jinete, aunque hay variaciones individuales en función de la longitud de los estribos, la conformación de la persona, la disciplina, el ajuste de la silla, el propio caballo…

El hecho de mantener siempre la misma postura hace que trabajemos en exceso una serie de músculo a expensas de debilitar sus antagonistas. Por ejemplo, es habitual ver jinetes con debilidad en estabilizadores de cadera, déficit en fuerza de glúteo mayor y tríceps braquial, y mucha tensión a nivel de los isquiotibiales, adductores y bíceps braquial.

Recuerda que tú también eres un deportista, y como tal, tienes que realizar entrenamientos complementarios a tu deporte para mantener tu cuerpo equilibrado y libre de lesiones. Consulta siempre con un profesional para que te guíe y aconseje en un plan de entrenamiento específico que se adapte a tus necesidades y características.